Si te estás preguntando si la abeja es un insecto, la respuesta es que sí. Además tienen un comportamiento muy interesante y son de vital importancia en nuestros ecosistemas. ¿Quieres saber más sobre este pequeño animal? Te lo cuento en este artículo.
Rasgos principales de las abejas
Al igual que la gran mayoría de los insectos, no tienen huesos sino un exoesqueleto, tienen el cuerpo dividido en tres partes (cabeza, tórax y abdomen), seis patas seis patas y dos pares de alas.
Pero las abejas presentan otras particularidades propias de su especie:
Tamaño y forma del cuerpo
Presentan un cuerpo pequeño, de forma alargada y estrecha, ideal para volar. Tienen un color puede variar dependiendo de la especie, pudiendo ser amarillas, negras o incluso con tonalidades verdes o azules.
Alimentación y sistema bucal
Tienen una dieta a base de néctar y polen. Para recolectarlo utilizan su sistema bucal, que se compone de una lengua larga y delgada llamada probóscide. Lo almacenan dentro del buche melífero y lo regurgitan al llegar a la colmena. ¿Para qué? Pues muy simple, así las obreras que están dentro de la colmena fabricarán la miel.
Comportamiento social
Otra característica destacada de las abejas es que tienen una sociedad organizada. La gran mayoría de especies viven en colonias o colmenas, donde cada individuo tiene una función específica: las obreras, las reinas y los zánganos. Este sistema de organización social les permite llevar a cabo tareas complejas como la recolección de néctar y polen, la construcción de panales y el cuidado de las crías.
Pues bien, una tarea que requiere de una cierta organización es la defensa de la colmena cuando se sienten amenazadas. Cuando una abeja percibe peligro, libera una feromona de alarma que alerta a las demás de la colonia. Esto puede resultar en un ataque de picadura en masa, por lo que es importante que los apicultores utilicen medidas adecuadas de protección.
También cooperan entre ellas a la hora de buscar fuentes de alimento. Utilizan una serie de movimientos llamados «danzas» para indicar dónde hay néctar y polen de calidad. Estas danzas son interpretadas por otras abejas, quienes pueden seguir las instrucciones y encontrar rápidamente los recursos necesarios para la supervivencia de la colonia.
Aunque también existen abejas solitarias, que no tienen una estructura tan organizada y van por independiente. Si quieres saber más sobre ellas, te aconsejo que vayas al siguiente artículo abejas solitarias.
Pequeñas, pero importantes
Puede ser que ya lo sepas, pero por si no lo sabías, de ellas depende gran parte de la producción de nuestros cultivos. Ya que además de ser responsables de la producción de miel y otros productos de la colmena, las abejas desempeñan un papel fundamental en la polinización de plantas. Sin ellas, muchas especies vegetales no podrían reproducirse y, por ende, se vería amenazada la diversidad y la seguridad alimentaria.
En resumen, las abejas son consideradas insectos debido a sus características físicas y biológicas. Su importancia en la polinización y su papel en la producción de miel las convierten en seres fundamentales para nuestro ecosistema. Para poder protegerlas creamos nuestro proyecto La Nava, donde mediante apicultura sostenible producimos miel natural de abeja y luchamos contra su extinción.
Referencias:
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