Si alguna vez te has preguntado qué comen las abejas, es probable que pienses inmediatamente en néctar y polen. Pero, ¿alguna vez has pensado si eso las hace ser herbívoras? ¿O acaso hay alguna abeja que rompe con esta «dieta vegetal»? Si quieres descubrirlo, sigue leyendo.
Su dieta se basa en productos de origen vegetal
Para empezar, es importante entender qué significa ser herbívoro. Pues esta palabra se refiere a los animales que se alimentan exclusivamente de plantas y materia vegetal.
Las abejas tienen como fuente de alimento principalmente de néctar y polen que obtienen de las flores. El néctar les proporciona la energía necesaria a través de sus azúcares, mientras que el polen les ofrece proteínas y otros nutrientes esenciales. Al ser ambos producidos por especies vegetales, las abejas podrían considerarse herbívoras. Sin embargo, es importante destacar que no mastican hojas ni comen tallos como las vacas, su relación con las plantas es más bien de mutuo beneficio, ya que estas se aprovechan de las abejas para la polinización.
La miel y la jalea real forman parte de su menú
Durante los meses fríos en los que el nectar y el polen escasean, las abejas se alimentan de miel, que es básicamente néctar procesado. La jalea real, por otro lado, es el alimento exclusivo de la abeja reina y de las larvas durante sus primeros días de vida.
Es importante mencionar que, si bien las abejas pueden consumir miel y azúcar, el pilar debe ser el néctar que contiene los nutrientes esenciales para su adecuado desarrollo.

Aunque la mayoría son herbívoras, existen excepciones
Si bien la mayoría de las abejas consumen néctar y polen, existen unas especies que se encuentran principalmente en América Central, más interesadas en los animales que ya han dicho adiós a este mundo. Sí, has leído bien, ¡carne muerta!
En lugar de buscar flores, se van tras la carne en descomposición de animales muertos, y de ahí su nombre, abejas buitre. Es un poco raro, lo sé, pero ey, ¡la naturaleza tiene muchas sorpresas para nosotros!
Y ¿qué pasa con las resinas y propóleos?
Pues ambos son sustancias que recogen de los árboles. Pero, ¡sorpresa! Las abejas no los comen, sino que lo usan como un material de construcción y un desinfectante en la colmena. Es una especie de «pegamento de abeja» que sirve para sellar pequeñas brechas y mantener a raya a patógenos y hongos.
Entonces, ¿las abejas son pequeños herbívoros voladores? En su mayoría sí, pero existen excepciones. No son simples consumidoras de plantas; más bien, tienen una relación simbiótica con ellas, ayudando en la polinización a cambio de alimento. Y aunque mayormente se deleitan con el néctar y polen, la miel y jalea real también son claves en su dieta. Como en muchos aspectos de la naturaleza, estos pequeños animales nos demuestran que las etiquetas no siempre son sencillas y que siempre hay algo nuevo y dulce por descubrir.
Referencias
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